viernes, mayo 27, 2005

oh punk

Cuando yo era chica decía cuando yo era grande hice muchas cosas, después me volví chiquita de nuevo y ahora voy a crecer otra vez.

sábado, mayo 14, 2005

verde sur

son las 2 y veinte
cuando te das cuenta de algunas cosas, no todas, algo feo te brota, algo de antiadrenalina
querés ser plenamente feliz pero no podés porque también
querés ser plenamente lúgubre pero no podés
entonces ponés unos neutral tunes, fumás, y tratás de decidirte
solamente te rescata una idea salvaje
después una agridulce
y por último alguna estupidez banal y urgente
por ejemplo qué te vas a poner porqué qué vas a decir qué vas a mostrar qué vas a querer qué vas a pedir qué vas a negar qué vas a callar qué vas a pensar qué vas a abandonar qué pierna vas a cruzar qué lugar vas a elegir para sentarte
cuántas veces vas a hacerte las mismas preguntas
cuántas veces vas a tratar de respondértelas

todo para que al final del día te pongas horizontal y te des cuenta que en realidad
no has hecho nada

lunes, mayo 09, 2005

mallas trucadas

a lo mejor por todo eso es que nací vueltera, fantasiosa, volada, olvidadiza
a veces no sé si agradecer o no
pero la vida es la vida

decía yo antes "una espada tengo aquí en el alma"
ahora suena graciosamente barroco y anticuado
maldito impulso de dar sentido a todo rimándolo

(diganme por enésima vez que no todo tiene sentido
y por enésima vez me voy a reír de ustedes)

ojo que ya no quedan ínfulas de más nada
solamente resabios idiotas
que por no querer tenerlos dando vueltas mejor mezclar
homogeneizar
amasar y estirar
y listo

tampoco era taaan profunda la cuestión
ni por un segundo

sábado, mayo 07, 2005

budismo práctico para el C4

un libro atrás de otro atrás de otro
para terminar con los ojitos cansados
nada mejor que unos momentos de relajación

pensar despacio que la vida no termina más, que no existe el error, que hagas lo que hagas todo puede salir bien, que no hay oscuridad que te llame ni luz que te encandile, que de repente cada mañana es sólo eso, una mañana, y no la punta de una madeja que sabemos, nunca se va a desenredar... que en realidad nadie te dejó nunca, sino que simplemente tuvieron cosas muy urgentes por hacer, y los amás tanto que no te importa... que podés volar a París abriendo los brazos mientras dura el recreo que te dio el profe, comprarte un sombrerito bombín y abriendo los brazos, volver y ser la última en entrar al aula, de no ser por ese flaco que se quedó pisoteando el pucho y al final fue él el último

(y hasta entender
que la gente es sólo gente
y las carteras orientales son sólo eso, carteras orientales)

nada peor que unos momentos de relajación
para volver con los ojitos cansados
un libro atrás de otro atrás de otro